La restauración de imágenes devocionales resulta una labor compleja, ya que no sólo implica la conservación material de la obra; sino también el respeto por aquellos valores que aportan un significado a la imagen. Bien se trate de obras devocionales, de alto valor histórico, artístico, así como cultural; nuestra sociedad actual tiene una importante responsabilidad: conservar esta riqueza patrimonial para que las generaciones venideras puedan disfrutar de su uso. Desde aquí alego a que estos bienes sean intervenidos por titulados en Conservación y Restauración, ya nuestra formación y experiencia es la única que puede garantizar la calidad en los trabajos  La imagen actual de Ntra. de los Milagros es una réplica de la anterior, destruida en la Guerra Civil y realizada por Mauricio Tinoco en 1937. Es una talla denominada “de candelero”, es decir; sólo se encuentra tallada la cabeza y las manos, mientras que el busto descansa sobre una estructura de 6 listones y una base octogonal de madera. Con respecto al Niño, se trata de un vaciado de escayola adquirido a los talleres “El Renacimiento”, de Olot (Gerona).

En principio y como paso previo a la intervención; se llevó a cabo un Informe Diagnóstico donde se reflejaba el estado de conservación de la imagen y el tratamiento propuesto por el restaurador.

Dentro de este apartado es necesario destacar el trabajo multidisciplinar que se realiza en materia de restauración; principalmente con los estudios de carácter científico. Gracias a ello se obtienen importantes datos que no son reconocibles con un simple examen visual.

Por un lado, los métodos físicos de examen (Rayos X, iluminación ultravioleta) nos permiten conocer la estructura interna de la obra, así como los estratos más superficiales.

En cuanto a los estudios analíticos, son necesarios para conocer la naturaleza de los materiales que configuran la obra, mediante la extracción de pequeñas muestras de soporte y policromía.

El estudio realizado a la imagen desvelaba un deficiente estado de conservación, no sólo por las condiciones climáticas del templo o su uso como imagen procesional; sino también por intervenciones inadecuadas.

A nivel de soporte presentaba grietas y deformaciones debido al movimiento de contracción y dilatación de la madera y a un mal ensamblaje de las piezas. También se observaba gran cantidad de elementos metálicos, así como el candelero y los brazos que resultaban inadecuados para su uso procesional. Con respecto al Niño existían numerosas reparaciones con pasta que ocultaban grietas y pérdidas de soporte.

A nivel del estrato pictórico; se reconocían amplias zonas con levantamientos, pérdidas y diversos desgastes. De igual modo existía una suciedad superficial generalizada, restos de maquillaje y adhesivo en el rostro, así como repintes puntuales en el caso del Niño.

La intervención se realizó de acuerdo con los criterios actuales de restauración; como respeto al original, mínima intervención y uso de materiales afines a la obra, estables en el tiempo y fácilmente reversibles:

● Fijación de la película pictórica mediante cola animal hidratada, empapelado y espátula caliente.

● Retirada de elementos metálicos, aproximadamente de 68 piezas en avanzado estado de oxidación. Sustitución de piezas funcionales por otras de acero inoxidable.

● Sustitución del candelero por otro no fijo; adaptando la base del torso a un sistema de casquillo, perno enroscado y palometa. También se sustituyeron los brazos por otros con articulaciones “de rótula”.

● Limpieza de la película pictórica. Retirada de la suciedad superficial, repintes y otros depósitos superficiales.

● Sellado de grietas con láminas de madera de pino y pasta de madera.

● Retirada de la pasta aplicada en la última intervención del Niño. Consolidación del soporte con una resina acrílica y reintegración volumétrica de las pérdidas de soporte.

● Estucado de las lagunas con cola de conejo y saturación de carbonato cálcico.

● Reintegración cromática de las pérdidas mediante un criterio de diferenciación a corta distancia (rigatino), primero con acuarela y posteriormente con pigmentos al Barniz.

● Protección final con Barniz de Retoque.

● Nuevo sistema de sujeción para los cetros, bola del mundo y aureola del Niño.

● Diseño de un sistema de cogida para la imagen del Niño

 

 

 

 

ANTONIO LÓPEZ GARCÍA
Restaurador y Conservador de Obras de Arte

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E-mail: anloga_82@hotmail.com